Días, los días pasan y yo te pregunto: ¿que vas a hacer al respecto? ¿los vas a dejar pasar?. Y tu me responderías: “y… pasar van a pasar”.
Pero esa no es la cuestión, no es tan superflua, como una de sus definiciones: “Ir por un lugar sin especificar a donde o en que dirección va”. Esto le da un giro a las cosas, que algo pase seria entonces un hecho insignificante para uno. Tendríamos que buscar otra palabra que la suplante.
Re-formulemos el anterior pensamiento; tendríamos que buscar una nueva palabra si queremos suplantar algo insignificante, pasajero por alfo importante y significativo.
La primer palabra que se me viene a la cabeza es “transitar”. Entonces seria ¿vas a dejar que tus días transiten? en consecuencia, a esta pregunta se le suma otra ¿por donde transitan? Y yo respondería: por la vida.
En este caso estaríamos hablando de un transitar metafórico, porque en realidad su verbo es “transitivo” y una de sus definiciones es “ir o pasar por la vida publica”. Osea, que en esta palabra incorpora la primera para algo publico.
La descarto, no porque no quiera usar metáforas, la vida esta llena de ellas. Sino porque no creo que sea la mas adecuada para la ocasión, ya que proviene de algo publico y la vida de la que estoy hablando es una personal. La vida que cada uno vive, a su manera, la que uno elige cada dia con pequeñas decisiones o grandes y duraderas. Las vidas que nos llevan a cada uno de nosotros vivir las consecuencias.
Volviendo a la búsqueda de la palabra, la segunda en mi lista es “Atravesar”. En este caso la pregunta cambiaría un poco mas que en la anterior.
¿Que tipos de días estas dispuesta/o a atravesar?
Según la RAE atravesar significa: “poner algo de modo que pase de una parte a otra”. En esta definición aparece la palabra “pasar”, pero en este caso es parte de un todo.
Ésta involucra la fuerza de voluntad de cada uno en “poner algo” para que pase algo. Para que pase lo que quiera cada uno que pase, en su intimidad y luego puede verse esta reflejada en lo publico como algo superfluo para los ojos ajenos, pero no para los de uno.